1919 – De los sucesos del martes

Comentario

El estado de guerra ha llevado la tranquilidad a la población.

Ayer Palma recobró su aspecto normal, gracias a la protección del Ejercito que en todas partes se notaba.

Vuelta la serenidad a los espíritus se juzgan severamente los allanamientos y saqueos de tiendas y almacenes, registrables solo donde se haya ausentado por completo la noción de autoridad: los vecinos tenían que presenciar indefensos como las turbas derribaban las puertas de sus casas y arramblaban con todo.

Se ha restablecido la calma y hay que hacer notar que se ha logrado sin incidentes, ni víctimas. La Autoridad Militar ha obrado con gran tacto y no ha elemento, por avanzado que sea, que pueda poner tilde a la conducta ni a los procedimientos de las autoridades militares. Una gran prudencia ha presidido siempre, procurando por medios convincentes restablecer la tranquilidad, antes que echar mano de procedimientos de fuerza.

No porque las aguas vuelven a ir por los cauces normales deben la Junta Provincial de Subsistencias y el Ayuntamiento dejar de la mano el problema de las subsistencias. Ahora, en caliente, es cuando pueden fructificar patrióticas iniciativas y arraigar ensayos de municipalización que en otras ocasiones no encontrarían el terreno abonado como lo está hoy.

Huerto asaltado

Anteayer tarde un grupo de revoltosos se dirigió a un huerto de la carretera que conduce a los Hostalets, destrozando toda la hortaliza y coles, que había sembradas.

Tropas llegan de Inca

Ayer por la madrugada llegaron de Inca, en tren extraordinario, parte de las fuerzas de infantería que guarnecen aquella capital.

Tropas en las calles

Durante todo el día patrullaron por la capital, varias secciones del Escuadrón de caballería, que muy de mañana salieron del cuartel.

A las siete de la mañana también se hallaba en la Plaza de Abastos, el general de brigada señor Nouvilas, con su ayudante comandante de infantería señor Garau.

Apertura de tiendas

Por la mañana se abrieron los comercios y tiendas de comestibles, siendo estas últimas guardadas por soldados de infantería.

Los tranvías

A la hora de costumbre salieron de cocheras los tranvías, éstos iban custodiados, por dos soldados de ingenieros en las plataformas.

En la Plaza de Abastos

Por la mañana a las seis y media se abrieron los puestos de venta en la Plaza de Abastos.

Llegaron en la Plaza, cinco carros cargados de verduras.

A la venta se hallaban dos terneras, que se habían sacrificado la tarde anterior y varia carne de cordero, esta última de la que se retiró anteayer al empezar el escándalo en la Plaza.

También empezaron a ponerse a la venta veinte atunes y gran cantidad de pescado fino y calamares, que habían conducido los carritos desde la Pescadería del muelle.

Estos durante el trayecto iban custodiados por una pareja de carabineros por orden del teniente señor García González.

También quedó apostada en la Pescadería del Muelle una pareja de dicha fuerza, con órdenes de que todo el pescado que fuese conducido a aquel punto, inmediatamente fuese subido a la Plaza de Abastos.

El pescado que fue subido ayer de la Plaza de Abastos, la mayor parte de los acaparadores lo guardaban para solicitar el permiso de embarque para anoche remitirlo a Barcelona.

Impidiendo el embarque de subsistencias

Todas estas disposiciones fueron ordenadas por el Capitán General señor San Martín, en comunicación al Teniente de Carabineros del Muelle señor García González, quien a la vez, le manifestaba que no permitiese ningún embarque de subsistencias.

También el Capitán General comunicó ayer al Administrador de la Aduana, señor Alabern, la suspensión de todo embarque de subsistencias.

A la una de la tarde y custodiados por la fuerza de infantería eran bajados de la Pescadería de la Plaza de Abastos al Muelle, varios atunes, sobrante de la venta.

Función benéfica

La función benéfica organizada por los Talleres de Santa Rita para anoche en el Teatro Principal, se suspendió a causa de los sucesos acaecidos 

Se celebrará hoy a la misma hora anunciada.

Las tahonas

En las tahonas y panaderías hubo pan en abundancia.

Guardaban cada una de ellas dos soldados de Infanteria.

La ciudad estuvo abastecida, reinando tranquilidad.

Las verduras

Cinco carretadas de verduras fueron llevadas al Mercado siendo vendidas por los productores: las coles pequeñas, a razón de 2 reales docena; lechugas, a peseta; cebolletas, a un real manojo; zanahorias, a 0’40 pesetas docena; coliflores, a cinco reales la docena las pequeñas y a dos pesetas las grandes; coles repollo a 2’50 la docena; y escarolas, a 1’75. A las revendedoras solamente se les permitía aumentos estos precios un pequeño tanto por ciento.

El concejal señor Quetglas, detenido y libertado

Las tropas detuvieron, se dice por excitación a las masas, al concejal reformista don José Quetglas.

El Alcalde accidental, señor Barceló y Caimari, y el concejal señor Villalonga y Olivar visitaron ayer mañana al capitán general, señor San Martín para pedirle la libertad del señor Quetglas.

A mediodía, el señor Quetglas fue puesto en libertad.

Bando del Alcalde

El Alcalde publicó el siguiente bando:

Francisco Barceló y Caimari, Alcalde accidental de esta M.I. Noble y L.C.

Palmesanos: La autoridad popular que por vuestros votos ocupa los puestos en que son mayores las responsabilidades, reclama de los hombres de orden que presten su cooperación para evitar sucesos que con pena recordamos. La Comisión Municipal de Subsistencias está constituida en sesión permanente y pronta a dictar todas las disposiciones dentro de la legalidad que conduzcan a resolver el conflicto 

Pero con igual celo y energía deben las autoridades de cumplir el deber de garantir el orden y velar porque se respete en absoluto el derecho de propiedad, impidiendo los movimientos de que pueden aprovecharse espíritus perturbadores y levantiscos, ocasionando daños y produciendo alarma cuya consecuencia sería, no el abaratamiento de los medios de vida, sino el retraimiento de la oferta en este mercado de las subsistencias alimenticias de primera necesidad.

A fin de remediar este gravísimo perjuicio y restablecer la normalidad de las transacciones, esta Alcaldía exhorta y ordena que se abran los establecimientos que surten al vecindario, las tahonas, los puestos de venta y las tiendas de comestibles.

Para la tranquilidad de compradores y vendedores esta Alcaldía garantiza el orden fiándose en la sensatez característica del vecindario y en las medidas que han dictado los Autoridades que, aunque con dolor, serán aplicadas rigurosamente en cao extremo.- Palma 18 de Febrero de 1919 – Francisco Barceló.

Recuperando parte de lo saqueado

Durante el día de ayer pelotones de tropas recorrieron las casas donde se sabía que había existencias procedentes de los almacenes saqueados, recuperando dichas existencias y deteniendo a buen número de personas como complicadas en los saqueos.

Buena parte de los géneros recuperados fueron conducidos al cuartel del Carmen y otros a la inspección.

En esta había; además de buen número de cajones de higos, un importante fragmento de carnero.

Las ordenanzas municipales

El Alcalde señor Barceló, atendiendo a los deseos expresados en sesión pública por algunos concejales, ha ordenado que se impriman unos cartelones conteniendo las disposiciones de las Ordenanzas Municipales, referente a la venta de carne, los cuales serán fijados en sitios visibles de la Plaza Mayor, para que no puedan alegar ignorancia los citados cortantes.

Tropas en el Teatro Balear

Las fuerzas que llegaron ayer mañana de Inca se alojaron en el Teatro Balear, cuyo edificio fue puesto a la disposición de la autoridad militar por su propietario don José Tous y Ferrer.

En el Almacén del señor Pomar Kleber

El señor Pomar, llegó ayer de Barcelona. Nos ha manifestado que anteanoche a las 8 recibió el telegrama en que se le daba cuenta del saqueo de su almacén habiendo tenido el tiempo justo para embarcar para ésta en compañía de sus señora esposa e hijos.

La cantidad de cajones de higos robados del almacén, ascienden, según nos ha dicho el señor Pomar a 6000 que tasados a 15 pesetas cada uno, da un total de 90.000 pesetas.

Después el señor Pomar nos ha manifestado que había recibido la visita del oficial de Aduanas don Antonio Jerez el cual por orden del Administrador ha procedido a un minucioso reconocimiento de numerosos cajones de higos para ver si contenían sobrasadas y alubias, como ha venido diciéndose entre el público.

Leemos que el señor Jerez practicó dicho reconocimiento no habiéndose encontrado en los cajones más que higos, que era la mercancía declarada y en los potes de hojalata, pulpa.

50 detenidos

La policía a las órdenes del señor Blanco durante el día de ayer, fue practicando reconocimientos domiciliarios, incautándose de las mercancías que halló en dichas casas, productos del saqueo de anteayer.

Las existencias incautadas eran llevadas a la Inspección y al cuartel y en cuanto a los saqueadores unos fueron conducidos a la cárcel y otros citados por la Inspección.

Se calcula que anoche los detenidos ascendían a unos cincuenta, los cuales están todos a disposición de la autoridad militar.

Subsistencias para hoy

El Alcalde accidental señor Barceló Caimari nos manifestó anoche que creía que hoy la plaza estará suficientemente abastecida en cuanto a carne y verduras.

Respecto a pescado como no habían salido las barcas de pesca, a causa del mal tiempo, cree que no lo habrá en abundancia.

En cuanto a verduras se volvió a indicar a los hortelanos que traigan géneros a la capital y referente a carne ayer fueron sacrificados 7 bueyes y 112 corderos.

Además cuenta la Corporación con trainta canastos más de huevos para la venta.

Retirada de fuerzas

En vista de ser completa la tranquilidad anoche ya circulaban los tranvías, sin guardia en la plataforma.

En la Cámara de Comercio

A la hora anunciada se reunió anoche la Cámara de Comercio como tenía acordado.

Presidió la reunión don José Esteva acompañado del Bayle del Real Patrimonio don Enrique Sureda y de don Damián Ramis.

Abierto el acto el señor Esteva dijo que el presidente de la Cámara don Miguel Salom no había concurrido por encontrarse indispuesto.

Ustedes –dijo- conocen el objeto de la reunión. La cámara en comisión fue al Gobernador para protestar de los actos cometidos anteayer. Se nos atendió y nuestras indicaciones han dado el resultado que deseábamos para reprimir los desmanes.

Ahora lo que nos proponemos es que cada cual exponga francamente los agravios recibidos, los perjuicios que le ocasionaron, la forma de atajarlos, etc.

Don Fernando Alzamora dijo que estaba enterado de que un exportador de almendra quiso embarcar hoy una partida no permitiéndoselo. Creo –añadió- que la almendra no es artículo cuya exportación deba suprimirse y deberíamos visitar al Capitán General, explicándole que ciertos artículos no son de primera necesidad

 

LA ALMUDAINA

20 de febrero de 1919