1922 –  LA FUSION DE LOS ALBAÑILES

 

Hacia tiempo que venía discutiéndose ese tan importante tema entre los compañeros de uno y otro Sindicato. Tema ese que todos los amantes de la organización estábamos esperando de un momento a otro a fin de que las fuerzas sindicales del ramo de albañilería volvieran otra vez por el camino que en tiempo pasados fueron la continua pesadilla de la ruin Patronal. Claro está que a todo obrero consciente de su deber para con la organización obrera, no le podía en manera alguna ser indiferente a ese tan importante asunto de la fusión entre las fuerzas disgregadas. Por eso no hemos cesado en nuestro empeño, hasta tanto la fusión no ha sido un hecho.

 

Una y mil veces hemos intentado llevarlo a cabo y siempre los socialistas nos habían obstaculizado.

 

Eso, si, queriendo hacer ver a los incautos borreguitos que nosotros hemos sido siempre la causa de que estuviéramos separados y que, por lo tanto, nosotros no queríamos la fusión y sacando como argumento que queríamos imponernos sobre ellos de que se dieran de alta en la Confederación Nacional del Trabajo.

 

Bueno, después de varias entrevistas de las comisiones de ambas partes y una asamblea de los dos Sindicatos y no haber podido hacer la tan deseada fusión –debido todo ello siempre a los buenos socialistas- el Comité del Sindicato perteneciente a la Casa del Pueblo nos convocó de nuevo para ver de llegar a una inteligencia por ambas partes. En efecto, nos reunimos las dos comisiones en nuestro local social y estamos de común acuerdo todos en hacer la fusión, Por lo que la Comisión de la C. del P. quedó en dar cuenta a sus afiliados.

 

El viernes 30 del pasado se reunieron para tratar dicho asunto y, como siempre, los socialistas con sus miras siempre a la política, importándoles un bledo la cuestión sindical, hacen de las suyas para que esto no se discuta. Y el lunes día 2 del presente vuelven ha reunirse otra vez, y las alimañas socialistas oponiéndose siempre a que se llegue a la fusión. Pero esta vez parece que la cosa cambia de aspecto a pesar de que sacan pinta de todo, los albañiles que tienen un algo de dignidad y conciencia de clase han sabido aplastar a todos estos que diciéndose socialistas eran la causa de que nuestro gremio siempre tuviera que ir a la cola de los demás gremios percibiendo, por lo tanto, menos jornal que ellos y siendo un desbarajuste no pudiendo que se cumplieran las bases estipuladas, ya sea por lo que atañe a la hora de empezar y dejar la jornada, ya sea en los jornales, como también, con el plus que al que sale de los 2 kilómetros le corresponde. Nada de todo esto se cumple, ¿sabéis el por qué? Pues muy sencillo, compañeros, porque los patronos han sabido aprovecharse de nuestra desorientación y esto lo saben los socialistas, pero para ellos eso no es nada ante la política. Para ellos la política lo es todo, aunque se nos mate de hambre.

 

Por eso han hecho todo cuanto ha estado a su alcance para que no llegaran a fusionarse los dos Sindicatos, porque sabían que fusionándose tendrían que ingresar en la Confederación, organismo este antipolítico, y esto, claro está, no les convenía a ningún precio. Pero, no obstante, a pesar de lo mucho que han hecho para que fracasara el intento del Comité no lo han logrado y han tenido que tragarse la píldora porque al fin los albañiles han sabido comprender que no era posible que por más tiempo estuviéramos disgregados no haciendo caso a los lloriqueos de algunas cotorras socialistas que nada saben de socialismo, a pesar de que quieran aparentar saber mucho.

 

Ahora, compañeros, todos debemos poner nuestro esfuerzo y saber para que nuestro Sindicato s ponga otra vez a la altura que debe estar, adelantando en poco tiempo lo que no hemos querido en mucho.

 

Salud y Revolución Social os desea.

 

MIGUEL RIGO

 

 

    CULTURA OBRERA nº 127

    21 de enero de 1922