LAS SUBSISTENCIAS
En esta localidad siguen igual las
subsistencias, con la agravante que tienden a
encarecer algunos artículos, puesto que se ha
iniciado un alza en el precio del carbón
vegetal. Anteriormente ya indicamos como se
había aumentado también el precio del alumbrado
por gas desde 1º de año. La situación general
por tanto empeora.
Sobre estos extremos llamamos la atención del
señor Gobernador civil y de nuestro
Ayuntamiento, puesto que no es posible seguir en
esta situación, que se hace insostenible para
todas las familias modestas.
Vemos que el Ayuntamiento de Bilbao, a propuesta
de la minoría socialista, celebrará una
manifestación para reclamar el abaratamiento de
las subsistencias y que invitará a todos los
Ayuntamientos de España a que hagan igual, pues
entiende dicho municipio que el encarecimiento
de los artículos de primera necesidad no tan
sólo son causas locales que lo determinan, sino
que las más importantes son de carácter general:
acaparamiento, aumento en los transportes, etc.
Esta iniciativa nos es simpática como todas las
que tiendan al mismo fin, es preciso, no puede
seguirse como hasta aquí, hay que hacer un
esfuerzo para conseguir abaratar las
subsistencias y para ello es preciso que se
concierten las voluntades de los interesados y
buena ocasión para ello es la iniciativa del
Municipio bilbaíno.
Pero para que la actuación que se haga en este
sentido tenga éxito, es necesario que todos los
ciudadanos le prestemos nuestro apoyo, por lo
que nosotros ya empezamos, dando a conocer los
propósitos de los iniciadores y esperamos que
nuestro Ayuntamiento al recibir la invitación se
sumará a tan hermosa y humanitaria campaña como
es la del abaratamiento de las subsistencias.
Y a todos aquello que crean que basta con
permanecer quietos y dejar que obre el Gobierno,
no haremos más que llamarles la atención sobre
los telegramas que la Prensa publica que
manifiestan lo que se agitan los cosecheros y
acaparadores, que abrigan los insanos y
antipatrióticos propósitos de exportar todas sus
cosechas al extranjero aunque aquí nos muramos
de hambre y esos acaparadores tienen poderosas
influencias, que se mueven al compás de sus
innobles egoísmos, por lo que ejercen gran
presión en la voluntad de los gobernantes.
Si todos los interesados –que es la inmensa
mayoría del país- nos agitamos lograremos
acallar los graznidos siniestros de los cuervos
de la acaparación y luego conseguiremos que el
Gobierno atienda a tan justa petición como es el
abaratamiento de la vida.
Núm. 727, 8 de enero de 1916
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