1921 –  Para el comediante Ferratjans

 

No está en modo de ser, el entablar polémica con nadie y menos con el comediante Ignacio Ferratjans.

 

El célebre transformista, en un artículo insertado en “El Obrero Balear” refiriéndose al conflicto suscitado en las obras de Porto-Pí, dice que los tres individuos expulsados de la Casa del Pueblo, lo fueron por unanimidad, ¡mentira! lo prueba los compañeros que se solidarizaron con nosotros, saliendo de la maldita Casa del Odio.

 

El muy tuno, dice que nosotros nos llamamos sindicalistas, pero que no lo somos; por eso, en vez de construir destruimos; en vez de enseñar Cultura a los obreros, les embrutecemos con las campañas de odio y venganza. ¡Mentira! Lo que es, es que siempre estamos sobre aviso para que no prosperen tus farsanterías. ¿Acaso crees que dejaremos que hagas lo que te venga en gana, embaucando a los albañiles que por desgracia suya, aun siguen como borregos tras el pastor, cuyo pastor eres tú, aprovechándose de ellos para que mañana te eleven, como antaño lo hicieron con tus correligionarios Bisbal y Ferretjans, para ir luego del brazo de los propios burgueses, aunque para ello tengan que tocar las consecuencias los obreros que hoy, aún todo lo esperan de tu charlatanería?

 

Es preciso, farsante socialero Ferratjans, que aprendas a hablar claro y no escribas tan hipócritamente como lo haces en un de tus párrafos; y para ello, me serviré de él para que los lectores de “El Obrero Balear” no crean un cosa por otra, que es lo que dice Ferratjans; dice así el parrafito en cuestión: “La conducta de estos individuos está gravada en el libro de actos. ¡Bonitos datos para su desdichada historia! Espléndidos recuerdos de los mal llamados sindicalistas”.

 

Vamos hombre, vamos, no sean tan idiota. Vengan estas actas en público y que se sepa clarito, nuestra conducta, sino, nos veremos en el triste y lamentable caso de tenerte que decir que eres tan hipócrita y tan malvado que no eres digno más que de un salivazo en el rostro por estúpido. ¿Dices que tienes fe y esperanza en que este movimiento escisionista desaparecerá? Debo advertirte que yo, como tú también estoy poseído de esta esperanza porque los que te siguen a ti como a los demás socialeros, estoy seguro que se irán desengañando de vuestras falsas teorías malditas y engañosas, y ese día … ¡Oh farsantes! A puntapiés sereis sacados de entre los desgraciados obreros que tanto tiempo ha estáis engañando.

 

Miguel Rigo

 

CULTURA OBRERA nº 94

28 de mayo de 1921