L'ENTRENAMENT PARAMILITAR DE LA FALANGE MALLORQUINA (Març del 1936)

En las cercanías de Manacor, en la posesión denominada San Martín, se encontró un magnífico campo de entrenamiento. Ofrecía condiciones de superficie y aislamiento, y ningún peligro para el ejercicio de tiro. Allá se trasladaron los camaradas Mulet, Juan Barberá y Néstor Gallego. Absortos en su entrenamiento, no advierten los camaradas cómo pasa veloz el tiempo. Néstor Gallego tiene que estar en Palma a las 2,30 para abrir la escuela, que regenta en sus funciones de maestro. El camarada Muntaner le llevará en su pequeño "Balilla". El regreso es veloz. La velocidad llega más allá de toda prudencia, y en la desenfrenada carrera se rompe el mando del coche, que va a chocar contra un árbol. La catástrofe no se produce milagrosamente. Los dos están heridos, pero no de gravedad. Avanza un camión y recoge los dos heridos. Los traslada a Palma y el conductor para ante la Casa de Socorro. Muntaner se da cuenta del peligro. !Lleva las pistolas¡ Salta rápido y, a pesar de las heridas, se escapa corriendo, con asombro del conductor y curiosos, que no comprenden aquella "espantá". Néstor Gallego, puesto en la mesa de reconocimiento, delira. Delira su obsesión de aquellos días: pistolas, ametralladoras, municiones, armas, etc. Los médicos se escaman y avisan a la Policía, pero cuando llega ésta ha pasado ya el delirio y ninguna palabra comprometedora logran sonsacarle.

Varios camaradas fueron a Buñola, pueblecito montaraz, al objeto de hacer prácticas de tiro. Ya en el campo elegido, se encontraron cerca de la Guardia Civil, y aunque ésta se dió perfecta cuenta de las intenciones de los falangistas, los dejó marchar al ver que, prudentemente, nuestros camaradas desistían de sus propósitos. Las primeras prácticas se hicieron en el predio de Vallgonera Vell, propiedad de Lorenzo Clar.

Marques de Zayas (Alfonso de), Historia de la Vieja Guardia (1955)

Reproduït

Gran Enciclopèdia de Mallorca

vol. 5  pàg. 159