El fenómeno Estrany

Estamos en el apogeo de la temporada de fenómenos, unos se llaman Belmontes, otros Gallitos y algunos que por su efecto brutal o animal también se les da el mismo calificativo.

Pero yo lejos de designar un adjetivo tan elevado, he estudiado algo el asunto y he podido convencerme que no es tal el Sr. Estrany; porque la verdad para obtener este titulo, es menester haber hecho una valentía, o una barbaridad cualquiera, Entonces se le dá el nombre de fenómeno.

Pues ¿para que habrá empezado el titulo de este articulo en esta forma? Se preguntaran muchos; es muy sencillo compañeros; Estrany y tiene una mano negra escondida que le ayuda a realizar sus planes bárbaros, que le induce a que destierre a nuestro maestro Bisbal, a que desorganice nuestras sociedades, a que acorrale a sus corderos, y los explotes sin compasión, y a que tanga sumisas bajo su mando absoluto, un sin fin de mujeres enfermizas, tuberculosas, para que cuando no puedan trabajar les quede el consuelo de morir en un Rincón del Hospital.

Y esto no son fenómenos, a esto se les tendría que llamar en castellano antropófagos y en mallorquín panches vergonyants, porque cuando un hombre de la talla de Estrany que se presenta ante la Sociedad como un padre y admite ayuda para desterrar a un pobre Zapatero, a uno que tal vez es el modelo de los Hombres, ya por su carácter templado ya por su honradez como ciudadano, -cosa que Estrany no puede decir muy fuerte- no merece tan alto capítulo al Sr, fabricante de .......

Pero no vaya a creerse V delegado del Zar de Rusia en Palma, y si aspira, piense que en Mallorca también hay rusos que son capaces a pedir con voz clara se le toma nota de sus atropellos y que se le juzgue con la misma severidad que tiene costumbre tratar a los pobres delincuentes que han caído en las garres de la reacción palmesana y en la que esta sirviendo de actor nuestro paisano D. Pedro M. Estrany por no querer representar su papel ningún cosaco de su ejército.

Rosafo

EL OBRERO BALEAR

Núm. 791, 7 de abril de 1917

El judici de can Estrany