Obreros sin trabajo
Otra vez vuelve recrudecer el problema de los
obreros sin trabajo en esta capital. El ramo de
albañilería es el más castigado por la crisis a
causa de las poquísimas obras que hay en
construcción, hallándose en la actualidad unos
centenares de obreros de dicho gremio sin
ocupación y sin esperanza de encontrarle por
ahora. A esta paralización de las obras hay que
añadir la de las industrias o artes anexos al
ramo de la construcción como son pintores,
carpinteros, herreros, etc., y se comprenderá el
alcance del conflicto que se avecina si
oportunamente no se pone remedio al mal, pues la
situación del obrero que no trabaja es siempre
desesperada.
De las obras del Puerto han quedado también sin
ocupación más de cien de los que allí trabajaban
y todo esto acumulará combustible para que se
enciend con más ímpetu el fuego.
Llamamos la atención del Sr. Gobernador y del
Ayuntamiento para que se prevengan con medidas
eficaces que solucionen el mal.
La pronta construcción de la Casa de Correos, la
de Aduanas, arreglo de empedrados por las calles
(que bien lo necesitan), derribo de murallas y
unas buenas gestiones con la Junta de Obras del
Puerto encaminadas a reponer a los obreros
despedidos seguramente darían un feliz
resultado.
El obrero que no trabaja no puede llevar pan a
su casa y cuando falta en los hogares la comida
suceden cosas graves. Sabemos que en la
Sociedad Centro de obreros albañiles se han
celebrado varias reuniones que se han visto muy
concurridas de gente del oficio que no trabaja.
Según nuestras noticias piensan exteriorizar su
malestar con actos y peticiones, muy justas, a
las corporaciones oficiales. También sabemos que
se han dirigido a la comisión pro subsistencias
de fuerzas vivas pidiendo su ayuda.
¿Serán atendidos los obreros albañiles?
¿Se esperará que el problema de los sin trabajo
se agudice más y más hasta que el desespero
venga a crear un conflicto grave para Palma?
Ser previsores es de sabios, no lo olviden las
autoridades.
Núm. 779, 6 de enero de 1917 |