La campaña de la Unión
Trabajo y subsistencias
En el último Congreso celebrado por la
Unión General de Trabajadores, se acordó
organizar una campaña de agitación para
protestar contra la conducta del Gobierno por su
cruzamiento de brazos ante la carestía de la
vida y la crisis de trabajo y el Comité Nacional
dando cumplimiento a los acuerdos del Congreso,
dirige a todas las organizaciones obreras la
circular que más abajo se inserta.
Creemos innecesario insistir en la importancia
que para los trabajadores tiene hacer que esta
campaña revista un carácter verdaderamente
proletario.
El Gobierno, el que debiera resolver estos
problemas, se ha cruzado de brazos y ¿qué hacer
ante esta indiferencia?
El pueblo productor se halla en una angustiosa
situación; en los hogares pobres, el hambre, la
miseria y el dolor los han invadido, y el
Gobierno lo sabe, pero calla. Espera que la ola
gigante avance y tras ella se lleve a toda tanta
personalidad estéril e inútil.
Hay que agitar a la masa obrera para que
proteste de la manera como se la gobierna y si
tras la campaña el Gobierno no nos atiende,
luego tendremos que poner en práctica el cuarto
punto que se acordó en el Congreso: la huelga
general.
A continuación insertamos la circular:
El Comité Nacional a las organizaciones obreras
Estimados compañeros: En circular del día 6 del
corriente dábamos cuenta de que este Comité
nacional había entregado al Gobierno las
conclusiones acordadas en el Congreso celebrado
en Madrid, el próximo pasado mes de mayo.
A pesar del tiempo transcurrido, el Gobierno no
da la sensación de que las reclamaciones hechas
le preocupen, no se ve que trate de resolver, o
por lo menos atenuar, la horrible situación que
padece la clase obrera por la carestía de las
subsistencias y la crisis de trabajo.
Por el contrario, ante las justas demandas de
los trabajadores, originadas por el malestar, el
Gobierno persigue y apalea a los que se atreven,
con sus gritos de angustia, a turbar la plácida
calma de los que se enriquecen a costa de la
miseria y el hambre del pueblo.
Conducta tan equivocada y abusiva tiene que ser
para nosotros un claro síntoma de que el Poder
público no está dispuesto a dar satisfacción
racional a las justas peticiones que con tanta
necesidad le hizo la organización obrera
española.
Este proceder de incapacidad o de desprecio, o
de las dos cosas a la vez, merece e la clase
obrera organizada, de los trabajadores todos, y
de cuentos sufren las consecuencias desdichadas
de la política de compadrazgos y de la
administración venal y de privilegio que el
Gobierno desarrolla, la más enérgica protesta, y
no decimos airada porque en el ánimo de nuestro
Congreso y en el de todos está el que se realice
dentro de la más perfecta legalidad.
Ha llegado, por tanto, el momento de dar
cumplimiento al tercer punto del acuerdo del
referido Congreso, que dice así.
Tercero. Que después de realizado esta labor
intensa de las colectividades, se celebren en
toda España, y en un mismo día, reuniones y
manifestaciones públicas encaminadas a conseguir
que se incorpore a nuestra acción el mayor
número de elementos posible.
Para que se realice esta manifestación de
protesta de los que trabajan y sufren, el Comité
ha señalado la fecha del 16 de julio, y espera
que la movilización de carácter nacional tendrá
la importancia que las circunstancias reclaman.
Dieciséis días faltan para llevarla a cabo; en
este plazo las organizaciones obreras deben
trabajar sin descanso, por medio de juntas
generales, manifiestos, convocatorias y cuantos
medios tengan a su alcance, para que el 16 de
julio diga al Gobierno que no puede continuar
por el camino de desatención que recorre, y que,
de seguir por él, se llegará a la huelga
general, y si tampoco fuésemos atendidos,
procederemos a resolver lo que determina el
quinto punto del acuerdo del Congreso.
Quedan vuestros y de la causa obrera.- Por el
Comité nacional:
El Secretario,
VICENTE BARRIO,.
El
vice.presidente,
FRANCISCO L. CABALLERO.
Núm. 753, 8 de julio de 1916
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