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TE SALUDO …
Te saludo .., querido semanario que ostentas el emblema de los que ansían la justicia, de EL OBRERO BALEAR.
Tú que también sufriste los rigores de la tempestad gubernamental y has permanecido forzosamente oculto por espacio de dos meses de las manos callosas de tus adoradores, vuelves a presentarte a la lucha con más ardor que nunca.
Consecuencia de tu quebranto, no pudiste decir lo que tu corazón sentía, lo que anhelabas lanzar en tus columnas, que era lo mismo que has venido haciendo durante nueve años de infatigable pelea y que está basado en la razón y la justicia.
Tus enemigos durante el tiempo que has estado alejado de la vida y especialmente los órganos de la “Buena Prensa”; han cargado sobre las espaldas de la clase que defiendes, una lluvia de calumnias y desatinos, forjadas en sus ratos de ocio y que solamente tienen cabida en cerebros vacíos como los que las han lanzado.
Te considero como la más poderosa arma de combate de los trabajadores baleares, en donde ellos pueden defender sus intereses, pueden denunciar cuantos atropellos se cometan en perjuicio suyo y pueden hacer frente al capital que es el principal factor de sus adversarios.
La clase que tiene la misión de defender, tiempo ha que añoraba: para ella eres un alimento sano que penetras en su espíritu y le das más vigor y aliento para proseguir el camino que tiene trazado.
Generalizada tu vida, podrás desprenderte de los cargos que se han acumulado contra el hermoso ideal que defiendes y proseguirás con más constancia y fe la misión que te ha sido confiada.
Bienvenido seas, y no dudes que tus admiradores te recibirán con más cariño que antes, a la vez que te estrecharán entre sus manos como una de sus más perentorias necesidades.
¡Me faltabas! … También faltabas a los que están al lado de las causas justas.
Te saludo.
Núm. 400, 6 de noviembre de 1909
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