1922 –  JUGANDO CON LA SERIEDAD OBRERA

¿Quiénes son?

 

En un artículo de fondo publicado en el número 1.042 de “El Obrero Balear”, con el mismo título que llevan estas líneas y que no tiene otro objeto que dividir por completo las huestes proletarias de Palma se dice entre otras falsedades que no reproducimos íntegras porque habría para llenar dos páginas de este periódico, que la “Federación Regional Sindicalista no funciona ni nade conoce en Palma”.

 

Con estas cortas cuartillas no pretendemos arrogarnos el derecho de defender la necesidad ni utilidad del Congreso que ha de celebrar la Federación Local, materia que emplean en el artículo en cuestión, malversando y falseando los conceptos y finalidad del mismo, porque esta labor creemos que sólo incumbe a los respectivos Comité que lo han propuesto, solamente pretendemos demostrar, con qué facilitad y frescura la redacción del citado niega lo existente y que ellos más que nadie conocen por ser su pesadilla continua, nos referimos a la Federación Regional. El decir que nadie la conoce en Palma, es decir y confesar que en el Partido Socialista no hay nadie. ¿Y para llegar a la conclusión de que don Lorenzo Bisbal director del citado periódico, por ejemplo es un don nadie, se publicaron en “El Día”, su aliado, varios artículos tildándole de “caudillo obrero, primer tribuno, verbo del proletariado mallorquín, representante de la voz del pueblo auténtico” y que él mismo ha reproducido en el periódico que dirige, haciendo caso omiso a la modestia? ¡Vamos, no juguéis con la seriedad obrera! Porque, una de dos: O estos galones o entorchados que le han regalado y que él mismo se ha colocado a expensas de la seriedad, son falsos, propios de los que usan los frescos en los días de Carnaval, y Carnaval es este ambiente aburguesado de Consistorio y política de partido turnante, o lo es, lo que se dice en el artículo citado.

 

La labor periodística y los trabajos de zapa que ha emprendido, desde las pasadas elecciones de las que fue derrotado por los mismos que le hicieron triunfar en otra ocasión (nos guardamos el nombre para mejor oportunidad) para impedir el que se haga una organización numerosa y fuerte, con sus campañas difamatorias dirigidas a organismos e individuos, que no ha mucho, cuando formaban parte de su redil eran excelentes personas, nos da la convicción de que a Bisbal lo han disfrazado tantas excelentes facultades.

 

Todavía hay más: Se ha dicho “que en el Partido Socialista se habían refugiado los hombres de ideas redentoras y de espíritu quijotesco”. Nosotros no dudamos de que en dicho Partido se haya refugiado algún hombre de ideas y espíritu tan humanitario, pero tampoco dudamos que ya no debe pertenecer a él, puesto que “El Obrero Balear” órgano del mismo, de tanto en cuanto publica maldades parecidas a la que entresacamos del artículo de fondo objeto de estas líneas. Dice así: “… y de la Confederación General también Sindicalista, que tantos descalabros ha producido en la clase obrera española y cuya administración y funcionamiento ha sido siempre y continúa siendo un misterio”.

 

Después de tantos asesinatos, tormentos y atropellos que vienen sufriendo los militantes de la C.N. por parte de la reacción española, insistir tantas veces en afirmar, un periódico que dícese obrero, que la C.N. es un descalabro para la clase obrera, es ser cómplices de la nefasta represión que lleva a cabo el Gobierno, como parte integrante del mismo.

 

Cuando por doquier se evocan aires de justicia y liberación para los mártires de la Confederación, cuando en Palma mismo, se ha celebrado un mitin por las Federación Regional y Local, sin miramientos de tácticas y enconos pasados, representando a toda la clase trabajadora organizada exenta de la tutela patronal, protestando de la sindicación forzosa, de la represión y de la suspensión de las garantías constitucionales, exigiendo su levantamiento inmediato y la libertad de todos los presos por asuntos sociales. “El Obrero Balear” tan sólo no se hace solidario de tan justa campaña, sino que ridiculiza a los compañeros que tomaron parte en dicho acto.

 

¿Y esto son ideas redentoras y espíritu quijotesco? ¡No! Esto es, por ejemplo, como si dijéramos, que D. Quijote cuando acude en auxilio de aquel joven que su amo ha atado en un árbol y le paga en azotes lo que el joven exigía como remuneración al trabajo efectuado, en vez de obligar al amo a pagar lo que el obrero debía y de dar libertad al mismo, se hubiera encarado con él y hubiese dicho: si, señor, lo que pide este joven, de la forma que lo pide y para el fin que lo pide, es un descalabro y un peligro para su clase, y aprovechándose de la fuertemente atado que lo tenía su amo por ser más fuerte y muy tirano, le hubiese echado su baba venenosa sobre las heridas causas por los azotes.

 

Eso o parecido es lo que hacen algunos socialistas de por acá.

 

Por eso los que estén un poco al tanto de los hechos, les será fácil averiguar quienes son los que juegan y se mofan de la seriedad obrera, y procurarán no ser cómplices también.

 

Un sindicalista de los analfabetos.

 

    CULTURA OBRERA nº 132

    25 de febrero de 1922